Pedro Sánchez dedica un buen pellizco de los presupuestos generales del estado al arreglo personal de sus ministros en comparecencias públicas. Pues no les vendrían mal unas clases de lengua española para que dejen de darle patadas a nuestro idioma.
Ahora entendemos el motivo por el cual los ministros no defienden el español como lengua vehicular, por qué no luchan para que nuestro idioma esté presente en las aulas y administraciones de todo el país: lo están destrozando.
Empezaron con obviar el neutro: cada vez que hablan de un grupo de personas en general nombran ambos sexos, ya no sirve decir niños ni padres ni ministros, ahora hay que decir niños y niñas, padres y madres, ministros y ministras, y así hasta el hartazgo. Han llegado al punto de inventar nuevas palabras y algunos intentan meter la terminación "e" para crear un nuevo neutro, y todo por eso del lenguaje inclusivo, que para muchos es una patraña; la RAE no lo ha reconocido.
Hoy hemos oído a la ministra Carolina Darias en Onda Cero con Carlos Alsina, donde ha tenido la oportunidad de dar otra gran patada a nuestro idioma.
Cuando Alsina le ha preguntado sobre los imputados del gobierno por presunta irregularidad en la compra de material sanitario al principio de la pandemia, ella ha contestado que todo se hizo con expediente de contratación y fiscalización previa. Que sin embargo, en el ayuntamiento de Madrid "hubieron yates de lujo, hubieron coches de alta gama, hubieron comisionistas y hubieron muchas cosas...".
Ese es el error grave: no sabe hablar, desconoce que el verbo haber es impersonal y que por tanto se conjuga sólo en tercera personal del singular. Tendría que haber dicho "hubo". Otra cosa es cuando funciona como verbo auxiliar de las formas verbales compuestas, que sí se conjuga en todas las personas, pero eso es otro cantar.
Carolina, si quieres otra día mientras te maquillan te lo explico con ejemplos y todo, y hacemos ejercicios para ver si te ha quedado claro. Me encantaría.
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