La Champions, por los pelos

Enhorabuena, Real Madrid, por la undécima. Y también al Atlético, que estuvo muy cerca. Fue una noche maravillosa: dos equipos madrileños luchando por el liderato en Europa, el San Siro plagado de banderas de España, y todo Madrid (y España) pendientes de dos equipos madrileños. Sólo uno podía ganar. El Madrid. 

Cuidado, Preysler: ¡¡¡tienes una rival!!!

Y se llama Marta Ortega, ni más ni menos que la heredera del imperio Inditex. Joven, muy estilosa, mona, divorciada, con un hijo y con un novio (que como no podía ser menos pertenece al mundo de la moda). O sea, que promete: hasta Bruce Springsteen la conoce.

Sevilla-Barcelona: dos aficiones diferentes

Le llaman fútbol y parece política. Dicen que es un deporte y algunos lo utilizan como herramienta reivindicativa. Juegan la Copa del Rey y pitan el himno nacional. Desde luego... 

Pau Gasol, un astro y tan normal

Este semana, para variar, voy a elogiar a alguien. Y ese alguien no es ni más ni menos que uno de mis deportistas preferidos: Pau Gasol. Aparece en ¡HOLA! y una vez más puedo asegurar que es un ejemplo para muchos. 

Londres, tan tradicional y tan moderna

Londres me alucina: cómo una ciudad con tantas tradiciones, y tan arraigadas, puede ser a la vez tan cosmopolita, tan multicultural y tan abierta. Llena a rabiar de gente joven, ves de todo, y sobre todo, las últimas tendencias. 

Estilosas y mete patas

De lo que he visto en ¡HOLA!, esta semana destaco dos estilismos maravillosos y dos espantosos. Los guays, que también tienen sus peros, son de la Reina y de Carlota Casiraghi. Los espantosos, de la infanta Elena y de Esther Doña.

Que se debilita la economía, dice Walsh

Yo me parto. Acabo de leer en el periódico las declaraciones del consejero delegado de IAG, Willie Walsh, quien dice: "La economía española se debilita por la ausencia de Gobierno".

A la familia real sueca le falta glamour

¿Qué ta parece la familia real de Suecia?, ¿te gusta? A mí poco. Les falta algo, un poco de estilo, algo de salero, no sé qué es... pero algo falla. 

Estudiar con tu hijo o no: ese es el dilema

¿Le ayudas a estudiar, o le dejas solo? ¿Eres de las que piensa que cuanto antes se estrelle, antes se pondrá las pilas? ¿O prefieres ayudarle como sea con tal de que saque buenas notas? ¿Qué postura es la ideal? ¿Cómo sabrás si estás acertando?