Si eres una mujer cuya imagen importa, porque asoma a los medios de comunicación con asiduidad, ¡¡por favor!!, no sigas los dictados de la moda a rajatabla. Piensa en ti, en tus hechuras y en lo que te va y luego selecciona de entre las piezas que están de moda.
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| Imagen de La Opinión de Málaga |
A todas nos gusta vernos bien. En las fotos que te haces con el móvil, si eres una persona anónima, y en las que apareces en los medios, si eres un personaje público. Para eso hay que sonreír, estar a gusto con una e intentar ponerte cosas que te favorezcan.
Si fueras Susana Díaz y tuvieras que ir al comité federal de tu partido (donde sabes que se va a hablar de ti y que te van a hacer millones de fotos) tendrías sumo cuidado con tu look.
Cada una se viste, se maquilla y se peina como más le gusta, pero si quieres mostrar tu mejor yo, no te pongas un top lencero negro con una chaqueta negra para ir a un congreso político, y menos aún si vas a estar sentada en una silla de plástico: el top se te va a descolocar, te va a hacer arrugas, el escote se te va a bajar y no te lo puedes tapar porque, ¡¡horror!!, la chaqueta te queda estrecha.
Si vas a una fiesta, una cena o algo especial, te colocas el dichoso top lencero que tanto te pirra, pero bajo una chaqueta ancha, un quimono o algo suelto y fluido. No se te ocurra volver a presentarte así en plena reunión de trabajo, y encima total black... ¡¡¡ni hablar!!!
Susana, chiquilla, para la próxima (que me temo que no se va a dar), una camisa blanca o una americana discreta y un pelín más ancha, para tener agilidad de movimientos, con bolsillos donde quepan los kleenex y un color que favorezca. Habrías estado mucho más cómoda y guapa.
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