miércoles, 8 de mayo de 2019

Victoria Federica y olé


Mantilla, peina, abanico, mantón de Manila, zapatos goyescos, pendientes de coral y vestido color albero. 
O cómo llevar todos los accesorios tradicionales y seguir siendo elegante, fashion y actual. Victoria Federica en la feria de abril. 





A sus 19 años se ha convertido en la heredera de la pasión y del compromiso de su madre por lo español, y más aún por todo lo del sur, por Sevilla y sus tradiciones.

Victoria Federica fue la madrina de la XXXIV Exhibición de Enganches de Sevilla, cita que abre la feria de abril. Así que pasó un fin de semana de locura. 

El viernes asistió a la cena del Real Club de Enganches de Sevilla  en el Museo de Carruajes. Iba guapísima, vestida de rojo por Vicky Martín Berrocal. Súper favorecida. 



El sábado, para asistir al concurso de enganches, eligió un vestido corto y recto, y una diadema estilo turbante que le daba un aire bohemio, moderno y súper chic. Ideal.

Y el domingo lucía estupenda 

con todos los complementos españoles encima: desde la mantilla beige con peina hasta los pendientes de coral. Entró en la Real Maestranza de Sevilla en calesa para dar comienzo a la tradicional exhibición de enganches. 

Llevaba un vestido color albero, o mostaza, el tono de la temporada, diseñado por Enrique Rodríguez Hidalgo, en crepé de seda.  
La mantilla con aplicación de Bruselas, el mantón de Manila y el abanico eran de Antigüedades Bastilippo, uno de los anticuarios más famosos de Sevilla. Los pendientes de coral, de la socia de Lourdes Montes en Miabril.

Para dar un toque fashion al look escogió unos manolos muy originales, con un toque goyesco, de color teja con pompones naranjas, azules y amarillos.


Todo, con el más puro sabor andaluz y tradicional, como buena hija de Elena de Borbón. Y con el estilo y el buen gusto que merece la hija de Jaime de Marichalar, el más fashion victim de todos los tiempos. 
Como siempre iba monísma, elegante, sonriente y discreta. 

Me encanta.

Porque tiene 19 años y le gusta España y sus tradiciones.
Porque, aunque se vista con mantilla y peina y represente estos valores, es una chica de hoy; joven, moderna, actual y muy cool. 
Olé y olé, Victoria. 

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