lunes, 8 de enero de 2018

‘El amor y los bosques’, el drama del maltrato

La última novela de Éric Reinhardt es la unión en una de varias historias de mujeres a partir de sus testimonios. Un libro bueno, pero triste. Con un protagonista terrible. 



En alguna reseña sobre El amor y los bosques dicen que la protagonista, Bénédicte Ombredanne, es una Madame Bovary moderna, una mujer en busca de una pasión. Nada más lejos de la realidad. 

Es la historia de un hombre simple, acomplejado, celoso, inseguro, malvado y cruel. Un hombre tan malo y tan incapaz que sólo sabe pagar sus ineptitudes con su mujer a base de atormentarla, atosigarla  y maltratarla psicológicamente. Y también llegará a golpearla. 

Un hombre gris, además de inculto, inseguro e indeseable, se casa con una mujer culta, enamorada de la literatura, que en su día fue maravillosa, guapa, dicharachera, simpática, locuaz, divertida... Una chica, que por elegir mal al hombre con el que compartir su vida, acabó ella misma destrozando su futuro. 

Hay tres narradores: ella misma, Bénédicte, que le cuenta su historia al autor; Éric, el escritor, que se convierte en un personaje más de su novela; y la hermana de Bénédicte, quien narra las más terroríficas vivencias de la protagonista.

Maravillosamente escrita, la novela desborda sentimientos: amor maternal, amor de hermanos, pasión y amistad, pero también soledad, miedo, terror, locura, así como inseguridad, crueldad y maldad. 

Los personajes están genial retratados, tanto es así que la crueldad del marido, Jean-François, es palpable, y la ternura de ella, su soledad, su miedo, su dejadez e incluso un atisbo de alegría al vivir una pequeña pasión.

Un libro bueno, pero sumamente triste: aparecen algunas ventanas que permitirían a Bénédicte escapar y salvarse de su cárcel, sin embargo ella no las ve, o no las quiere aprovechar, con la excusa de que sus hijos son muy pequeños.

Descripciones llenas de realismo, diálogos geniales y sentimientos encontrados: te gusta pero te horroriza, te engancha pero quieres que acabe tanto sufrimiento; hay mucho dolor y mucho amor; acoso y aguante; odio y deseo; celos y miedo; locura y cordura, y enfermedad, mucha enfermedad, que es como acaba la mujer acosada y maltratada, deshecha psicológica y físicamente. Te solidarizas con ella, se convierte en tu amiga, te dan ganas de abrazarla. 

Es la historia del maltrato psicológico. De cómo poco a poco, Bénédicte se va haciendo pedazos a base de los comentarios negativos de su marido, de las críticas constantes, los insultos, la forma de controlarla... La actitud, los modales, el comportamiento, la falta de educación, ya no de cariño, y hasta la forma de llevarse a los hijos a su terreno. 
Dicen que es un tema de gran actualidad. Si así es, por favor, que los chicos y hombres de mañana lean este libro. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario