Aunque parezca mentira hubo un tiempo en que la gente salía a la calle y los jóvenes viajaban, tenían relaciones, y hasta desaparecían sin que sus padres supieran nada de ellos.
¿Qué harías si sospecharas de tu hijo? ¿Si creyeras que es culpable de un crimen? ¿Lo defenderías?, ¿o preferirías hacer justicia ?
Este dilema te trae Fiona Barton, una periodista británica que además de contar con el Premio Nacional de la Prensa británica de 2008, es una autora de novela negra.
La sospecha es su último trabajo. Cuenta la historia de dos chicas que se van de viaje a Tailandia y, de repente, un día desaparecen; nadie sabe nada de ellas, ni sus padres, ni sus amigos, nadie, ni siquiera aparecen en las redes sociales.... Comienza entonces la pesadilla para sus padres.
Investigación policial y periodística, viajes a Tailandia, chapuzas policiales, crímenes, mentiras, drogas, alcohol, secretos inconfesables, relaciones sexuales. Este viaje acaba siendo un viaje sin retorno.
En la tercera novela de la británica vuelven a la carga la periodista Kate Waters y el inspector de policía Bob Sparkes, para investigar sobre la desaparición de estas chicas. Y la historia les llevará a ocupar el primer lugar en las pesquisas.
La novela engancha gracias a su agilidad narrativa, el cambio de foco y de narrador, los flash backs y sobre todo el lenguaje fluido, los diálogos, un estilo muy directo y un ambiente moderno, actual y cercano.
Eso sí, sacas varias enseñanzas. Una, para cuando puedas salir de viaje de nuevo: no lo hagas nunca con alguien que no sea buena amiga, que la conozcas bien y te puedas fiar de ella. Y otra: que tus hijos nunca te cuentan toda toda toda la verdad, pero que siempre se acuerdan de ti, su madre.
Eso sí, léelo despacio: estos días a todos nos cuesta más la concentración, pero a la vez te ayudará a desconectar de la situación actual.
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