miércoles, 25 de junio de 2014

Disneyland Paris, el paraíso de las familias


Si hay un destino donde los niños disfrutan y los padres también, ése es Disneyland Paris. Magia y diversión en familia. Momentos inolvidables y emoción para todos. Un viaje donde los niños nunca están cansados.  







Te cruzas por sus calles con Mickey, Minnie, Pluto, Goofy, o con Peter Pan, el Capitán Garfio y cualquiera de las princesas y príncipes; con mil y un personajes que marcaron tu infancia y la de tus hijos. 





Se trata de un lugar de ensueño. Las casitas, los castillos, las flores... cualquier detalle está cuidadísimo, las calles súper limpias: constantemente las barren. Y encuentras atracciones para todos los gustos: desde las más tranquilas hasta aquellas diseñadas para los más atrevidos. Montañas rusas de infarto y barquitos y trenes tranquilos para un paseo de relax, perfecto para los más pequeños y para los mayores. Porque abuelos hay muchísimos.




Todo el personal va vestido según la zona en la que se encuentre: el país de la fantasía, el de las aventuras, del lejano oeste o del espacio. 

Tienes la oportunidad de volar en el barco de Peter Pan, de perderte por el laberinto de Alicia, de entrar en el castillo de la Bella Durmiente o en el bosque de Blancanieves, o vivir la experiencia de Pinocho. Pero además puedes participar en un combate desde el barco de los piratas del Caribe, de soltar adrenalina en el tren de Indiana Jones o en viajar a bordo de un tren de madera por el gran cañon de Colorado, de surcar el Mississippi o de emular a los soldados más intrépidos subiéndote en un paracaídas a miles de metros de la tierra. De todo para todos los gustos. 



Cada tarde disfrutas de la magia Disney en sus desfiles. Bueno, en realidad disfrutas con las caras de los niños. Cómo lo viven, cómo miran a cada personaje, cada carroza: boquiabiertos, sin pestañear, alucinados.

Y es que el casting para los personajes de carne y hueso es fantástico: son igualitos a los personajes de las películas, y los muñecos están hechos a las mil maravillas. 




Puedes cenar con Mickey y sus amigos, vivir una intensa experiencia al más puro estilo del lejano Oeste, citarte con las princesas y príncipes, y por la noche, antes de ir a la cama, es obligatorio disfrutar con el espectáculo Dreams, que te inunda de la magia Disney: fuegos artificiales, efectos especiales, música, pesonajes, y como centro el castillo Disney. Sueños hechos realidad. Fantástico. De verdad. 

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