De ambas, es mejor Pancho, el perro millonario. Al perrito te lo comes, es una monada, y Patricia Conde, a ratos; unas veces te hace gracia y otras te dan ganas de llorar de la vergüenza; Alberto Massagué, también podría estar mejor. Pero el resto del elenco, Armando del Río y otros dos que hacen de malos, infumables, vergonzosos. Malos malísimos. Pésimos.
El principio de la peli crees que no la vas a soportar, pero en un momento remonta un poco, y más o menos se salva. A los niños les gusta muchísimo porque el prota es un perro, un jack russell, que salva a un niño de la apatía y tristeza en la que se hundió tras la pérdida de su anterior mascota. Por lo menos es positiva y no se oyen palabrotas.
Juntos y revueltos es una americanada. Palabrotas, expresiones vulgares, venga a hablar de gays, y de lesbianas, de las partes íntimas de los seres humanos, con verbos que no vienen al caso en una película para niños... Fuimos porque transcurre en África en un safari y esperábamos ver más animales y más África, pero en realidad deja muchísimo que desear.
Adam Sandler siempre igual, con el mismo papel, vestido con chándal y diciendo tonterías y Drew Barrymore, una histérica que se pasa la peli chillando. Ambos tienen hijos en la peli; los chicos son insufribles y las chicas tienen un pase.
Es bastante floja. Se salva porque al final gana el amor y los buenos sentimientos y porque hay alguna fotografía de África. Algunas, más bien pocas.
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