La sencillez de los de Mónaco

Carolina y su clan son para ¡HOLA! como la cabecera de la revista. En este número con más motivo: sólo aparecen los más glamurosos: ni la pobre Charlene, ni Estefanía y sus hijas. Tampoco aparecen los malotes de la familia, Andrea y Tatiana, que son el prototipo de pijos malotes, ¿o no?

Esta  semana toca hablar de la sencillez de los de Mónaco. 
La revista titula "Carlota Cashiragi, una naturalidad de impacto". O sea, que ¡¡¡sólo por ver a Carlota tan natural te da un jamacuco!!!

Y sigue: "Tras un vuelo de más de 11 horas entre París y Los Ángeles, Carlota bajó del avión sin apenas síntomas de cansancio y tan sólo luciendo un ligero maquillaje.

Vamos por partes: sentadita en un sillón confortable, (no va a ir en low cost la aristocracia monegasca), sin el bebé, leyendo, dormitando y a su edad. ¿Es para estar agotado? ¿En serio lo dicen? 

Punto dos: ¿no pretenderán que vaya como una puerta para viajar avión? Pues claro: lo suyo es un maquillaje ligerísimo. Todas lo sabemos.

¡¡¡Y sigue!!!: "Paseaba por los pasillos de la terminal como si de una auténtica modelo se tratara, marcando estilo". Que se despidan Isabel Preysler, Tamarita Falcó, Ana Boyer, la reina Letizia, o cualquier mortal: si no eres una auténtica modelo, pero auténtica, jamás podrás marcar estilo. Desengáñate. 

En la otra página dice que Carolina de Mónaco derrochó sencillez en una exposición de arte en Montecarlo. Ni idea de cómo se derrocha eso.

Me encanta Beatrice Borromeo: monísima, muy elegante y estilosa; va siempre ideal. Su novio, Pierre, parece bastante menos excéntrico que su hermano. Iban los dos estupendos en el Rally de Montecarlo (acto importante donde los haya).

Con lo que flipo es con la manía de la gente de regalar chorradas a los recién nacidos. Ya verás cuando vea Charlene aparecer al príncipe Alberto (ella, que apenas se compra modelos, y si se los compra no se los vemos): dos minicoches de carreras le regalaron en el rally. 
Cuando esos bebés puedan jugar con coches ya habrán coleccionado una escudería completa: a dos por rally. Dos, para evitar trifulcas familiares. ¡¡¡Si es que la gente está en todo!!!

¿No te dije que las mujeres (las más afortunadas) que no saben qué hacer con su vida se dedican a diseñar (joyas, ropa, bolsos, o cremas como la Preysler)? 
Hoy mismo me reitero: Marie Chantal de Grecia diseña ropita infantil. Y yo me pregunto: ¿hay mercado para tanta creatividad?