‘Tengo en mí todos los sueños del mundo’, deliciosa

Se trata de una mezcla de Titanic, de novela histórica de principios del siglo XX, con toques muy a la española, y hasta podría convertirse en un guión para una serie de televisión. De esas que se han puesto tan de moda, como La sonata del silencio, de Paloma Sánchez-Garnica.

No en vano Jorge Díaz es guionista; Hospital Central, Víctor Ros o Acacias 38 son algunos de sus trabajos para televisión. Además, ha publicado otros libros como Cartas a Palacio o Los número del elefante. 

Gabriela es una joven de Mallorca enamorada de un pescador a la que casan contra su voluntad con un señor afincado en Buenos Aires. Gaspar es un periodista amenazado y perseguido por sus artículos mordaces. Raquel, una cupletista de vida alegre, que cree que le ha llegado la hora de cambiar de vida, y parte en busca de aires (y hombres) nuevos. Paula, una camarera de barco, busca la fama como diseñadora de modas en la capital argentina. Mercedes regenta una pensión y se ha prometido con un hombre al que aborrece. Eduardo Sagarmín está infelizmente casado y le une gran amistad con el rey Alfonso XIII. Sara es una judía ucraniana, a la que pretenden vender para prostituir, y Guilio, un chico italiano, que acaba de desertar de la guerra por amor. 

Todos estos y otros personajes embarcan el 17 de febrero de 1916, en plena Gran Guerra, en el Príncipe de Asturias, el barco más moderno y lujoso de la naviera Pinillos, muy del estilo del Titanic. Zarpa de Barcelona rumbo a Buenos Aires, donde todos esperan encontrar una vida mejor, el amor de verdad y un trabajo digno. 

Maravillosamente narrado, con descripciones estupendas e historias paralelas que te cautivan desde el principio. Econtrarás muchos protagonistas, pero están perfectamente perfilados, hasta les coges cariño. Y todo esto con el soporte de un hecho real. 

Te lo recomiendo. Es una libro ameno, con muy buen ritmo, interesante y con mucho que contar. 

Tantos personajes, tantas historias y tan diferentes, pero no te pierdes, están tan bien contadas, tan perfectamente estructuradas y pergeñadas, que llegas al final sin liarte. Pasas de una historia a otra con una facilidad asombrosa, de una parte del mundo al otro sin perderte. Una maravillosa novela coral, sí señor. 

Es un libro tan fácil de leer y tan grato y me ha gustado tanto, que cogeré otra novela de Jorge Díaz.