¡¡Bravo por el Rey!!

Del viaje de los Reyes a Londres se ha escrito mucho, se ha dicho más y aún se sigue diciendo. Lo cierto es que más que del viaje, de lo que se ha hablado, y se habla, ha sido del equipaje de doña Leti. 

Del felipe varela amarillo, estilo inglés total, con un tocado de ala media. Del azul largo de Carolina Herrera con escote asimétrico y cola, así como del rojo espectacular de Varela, con cristales bordados, escote bardot y cintura marcada. Todos espectaculares. 

Pero, sobre todo, se ha comentado el despliegue de joyas. La reina no se cortó un pelo a la hora de adornarse con el tesoro de la corona. Y se colocó dos tiaras: la de las Reinas de España, de Ansorena, con tres flores de lis y 500 diamantes, con el vestido rojo, y la de las flores, de la que dicen que es su favorita. Así como las pulseras de Cartier, unos pendientes de rubíes y diamantes, otros de diamantes y zafiros, de perlas y oro, y broches para sujetar las bandas. 



O sea un despliegue de joyas nunca visto. Si te fijas, nunca o casi nunca, lleva collares. Pero, claro, si se adorna la cabeza, las orejas con pendientes enormes y las muñecas, el escote tiene que respirar, que tampoco es plan de echarse encima y del tirón todo el joyero.

Si algo hay que destacar de este viaje, si algo ha quedado patente una vez más es que nuestro Rey ha estado fantástico. Lo ha hecho genial.

Elegante, con un fachón, impresionante, suelto y resulto, seguro de sí mismo, sonriente, relajado, impecable. Moderno, joven, preparadísimo, con modales perfectos, sabiendo cómo comportarse en cada momento. Nada carca, nada anticuado, al revés súper actual.

Perfecto para representarnos. Él sí que es la imagen que queremos de la marca España. 

Así que, al fin y al cabo, la parte de los impuestos de nuestros padres y abuelos que se destinaron a la educación del que hoy es nuestro rey sí que tuvieron buen uso. Ahora lo vemos. Sin un pero. 
Ahí sí que estuvieron acertados sus padres y la Casa Real. 
Bravo, Felipe VI. Hoy por hoy, le prefiero a usted antes que a ninguno de los políticos que tenemos, y tenemos políticos a porrillo.