La marca Reina

Cada vez se parece menos a sí misma y más a la imagen que quiere crear. Letizia Ortiz ya no es Letizia Ortiz: desde hace cuatro años se ha convertido en la reina de España, y está depurando su look. 

En su última aparición estelar, nuestra reina se mostró, una vez más, espectacular. Fue en el Teatro Real, para inaugurar la nueva temporada.

Iba con un diseño de Pedro del Hierro (que le viene de maravilla, ya que dicen las malas lenguas que esta casa está de capa caída), un maquillaje y un físico alucinantes. 

Pero, eso sí, parece otra; está guapa, pero ya no es Letizia Ortiz, es la reina. 

La imagen que lució se ha comentado por todos lados: unos dicen que el moño es una copia de los de Megan Markle, otros que el mono de crepe azul, con escote asimétrico, capa y pantalón palazzo era más propio para lucir sobre una red carpet que para una reina.

También insisten en que Letizia potencia su bronceado y su musculación con un maquillaje corporal, que a base de brillos destaca las zonas de brazos, hombros, escote y espalda a las que quiere dar más importancia.  Y lo consigue. 

No es de extrañar que se lo currara tanto: ella sabía mejor que nadie que asistirían otros bellezones con los que debería medirse, como Isabel Preysler, Esther Doña y Nuria González (todas enfundadas en pantalones, la nueva etiqueta femenina), y también con la espectacular Eugenia Silva, que lucía un vestido midi verde alucinante. 

Ya puesta a depurar su imagen, que parece que está trabajando en la marca Reina, a Leti no le vendría mal darle una vuelta a su nombre y definitivamente ajustarse a la ortografía española, para llamarse sencillamente Leticia. 
Sería una prueba más de cómo se está trabajando su imagen y su todo para ser una reina de bandera. Una muestra de respeto hacia lo español, los españoles y nuestra lengua. 

Gracias, graciosa majestad.