lunes, 19 de mayo de 2014

Una sesión de belleza


Carolina de Castro Beauty Coach es un centro de belleza en la calle Caleruega de Madrid. 

Relativamente nuevo, lo regenta una chica joven, súper trabajadora, que ha convertido este pequeño local en el santuario de la belleza de El Pinar de Chamartín, además de un universo súper femenino, con mujeres de todas las edades que se preocupan por estar bien, en un ambiente relajado, donde se oye un murmullo muy agradable de voces y risas femeninas. 






Allí te puedes hacer de todo: desde una manicura exprés hasta extensiones de pestañas, sin olvidar tratamientos especiales para novias, por ejemplo. 

Os voy a hablar del tratamiento Premium, con radiofrecuencia incluida. 
Recomendable para ocasiones especiales: tanto por sus resultados como por lo que te relaja. Una hora entera para ti; sin ruidos, sin móvil, sin listas de la compra, sin estrés de curro, sin niños y sin fogones.






El tratamiento comienza por la aromaterapia, en la que te dan a elegir tres tipos de aceites esenciales con propiedades ideales para tu cuerpo y tu mente. El que yo elegí era a base de limón y té verde, relajante para el alma y antioxidante para la piel. 
Luego te limpian el rostro, te aplican tónico y un exfoliante suave. Después una mascarilla a base de ácido hialurónico y vitamina C, y por fin la radiofrecuencia. 

Se trata de aplicar calor por la cara, haciendo hincapié en las zonas donde más lo necesites, para que los músculos se relajen y produzcan más colágeno, con lo que se rellenan los surcos de algunas arruguitas o líneas de expresión. 

Despúes de la radiofrecuencia, te ponen una mascarilla de velo a base de ácido hialurónico, siliconas hidratantes y retinol, con efecto relleno de microarrugas; extracto de centella asiática, que aumenta la flexibilidad del tejido conectivo y estimula su formación, y vitamina E, antioxidante. 
Y mientras, te obsequian con un masaje en los brazos. 

Relaja muchísimo y, bueno milagros no hacen, pero la cara parece más relajada y luminosa, se elimina algún rastro de estrés, se mitigan algunas arruguitas y la piel parece más gruesa. 

Lo ideal es hacérsela periódicamente y sobre todo antes de algún acontecimiento o porque justo ese día quieras estar espléndida.


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