martes, 1 de junio de 2021

El hijo menor del duque de Alba, como un príncipe azul

Las bodas de la casa de Alba son como de cuento. Perfectas para verlas en las revistas y sobre todo si pronto, o tarde, se casa alguien cercano. Te pones al día para ir genial a cualquier celebración



La última fue la de Carlos Fuitz-James Stuart y Belén Corsini; el hijo menor del duque de Alba y la hija del empresario Juan Carlos Corsini, los duques de Osorno. Con este enlace comienzan otra vez las grandes bodas después de la pandemia. Eso sí, previos PCRs a todos los asistentes, tanto invitados como trabajadores. Dicen que era una boda íntima ¡¡¡asistieron algo más de 300 invitados!!!

Los novios son de la aristocracia, jóvenes, guapos y felices; la vida les sonríe, uno es hijo de un duque y nieto de una Grande de España y ella viene de una saga de empresarios; sin grandes problemas, con una vida que parece un camino de rosas.

Él parecía un príncipe con el uniforme de gala de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla y ella, con un vestido ideal del taller de Navascués, de corte imperio, manga abullonada en georgette con escote en pico y una cola maravillosa de plumeti desmontable bordada con pequeñas florecitas que daban un toque de color. Llevaba pendientes de diamantes, anillo de compromiso con brillante y se peinó con una sencilla coleta sujeta con una joya de su madre a modo de casquete de plata y diamantes

La boda fue de ensueño. En el palacio de Liria. Para colmo de buena estrella, lució un día primaveral, que les permitió celebrar la ceremonia religiosa y el banquete al aire libre, donde todos los invitados pudieron maravillarse de los jardines estilo versallesco del palacio, adornado para la ocasión y con la bandera ducal ondeando.

Después de mirar y remirar a los novios llega el capítulo invitadas: Sofiía Palazuelo iba espectacular, súper elegante y favorecida, así como la madre del él, Matilde Solís, con mantilla y vestido rojo, e Inés Domecq, la diseñadora del momento gracias al mono de su firma que lució la reina en Fitur y del que todo el mundo habló. Eugenia Martínez de Irujo llevaba un vestido rosa que apenas le favorecía, o eran las fotos; Bárbara Mirjan la novia de Cayetano, acudió sin él (estaba hospitalizado). Las amigas de Belén iban todas ideales, y en cuestión de estilos había para todos los gustos entre tías, hermanas, primas... Los niños, para comérselos con los tonos de la novia y con zapatitos ideales. 

Se llevan los vestidos midi, aunque alguna lo eligió largo, con colores vibrantes y estampados florales. Para la cabeza todo está permitido: desde la pamela más historiada a prescindir de tocado. Los peinados, sencillos: ondas rotas, melenas que parecen apenas trabajadas o recogidos semi deshechos, y se imponen las coletas por su sencillez, porque dejan ver los pendientes, quedan genial con tocado y es un recogido juvenil que resta años. Los grandes pendientes se llevan la palma en cuanto a joyas. Para los pies, las sandalias de pulsera y los zapatos de salón, y lo más complicado de todo: medias súper naturales, o una crema espectacular, que dé brillo y aporte color. 

De ensueño. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario