‘La gran serpiente’

Pierre Lemaitre se estrenó con esta novela en el mundo literario. Macabra, sí, pero menos. 

Si has leído otros títulos del autor francés y después este, te darás cuenta de que con el paso de los años, la pluma de Lemaitre, sus historias y sus protagonistas han ganado en crueldad, crudeza y morbosidad. Sin duda, esta novela es obra de un principiante en la novela negra: si de algo puede presumir es de escribir los libros más bestias e inimaginables. Y este aún no llega a su top. 

La gran serpiente es la primera obra de Lemaitre. Cuando el autor decidió no escribir más novela negra, se encontró con esta historia y tras pulir un poco su estilo decidió publicarla a modo de despedida. 

Narra la historia de una señora viuda de mediana edad, jubilada, fría y calculadora, dueña de un dálmata, madre y suegra, ahorradora y coqueta en recuerdo a su belleza de juventud. Fue una asesina a sueldo para los servicios de espionaje franceses y gracias a su frialdad y seguridad se ganó el respeto de la inteligencia francesa. Aún hoy le encargan algún trabajito, porque ella dispara sin estremecerse, mata sin despeinarse, como si fuera algo cotidiano.

Llena de ironías y sarcasmo, la novela tiene algo de humor y deja entrever las maneras de Lemaitre. Se trata de una historia inverosímil, que mezcla escenas cotidianas con otras inimaginables, arranca sonrisas una veces y te deja pasmada otras. Con un final sorprendente. 

Y es que de Lemaitre te puedes esperar cualquier cosa.