miércoles, 26 de noviembre de 2014

El nieto de Carolina de Mónaco, para comérselo

Rubito, gordito y con las rodillas llenas de rollitos. Monísimo el hijo de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo. 








Pero es que además va ideal: con una chaqueta austriaca cámel y unos pantalones de peto de terciopelo marrones cortos de los que asomaban los rollitos de las rodillas. 


Así de mono iba el Día Nacional de Mónaco, de la mano de su abuela, quien también estaba espectacular con un tocado floral con redecilla (y yo creo que recién retocada). 


Tiene 57 años, pero está estupenda, porque aunque se retoque parece una señora, estupenda, pero una señora, y no se confunde con su hija. 


Tatiana Santo Domingo tiene un estilo súper peculiar, a mí me gusta: llevaba un abrigo con detalles de encaje sobre un vestido del mismo color, y un tocado de lo más original. 



El que no me convence nada es su marido: ¿no te parece que tiene pinta de mafioso? Pierre, el hermano, parece algo más normal. Dentro de la normalidad de este clan, que son como una pandilla de amigotes (eso sí bohemian chic, no te olvides), con la matriarca a la cabeza. 










¿A que la Reina se ha hecho algo en la cara? la tiene mucho más rellenita que la semana pasada. 

















Sigo pasando las páginas de ¡HOLA! y me embarga la tristeza al ver a Eugenia y Cayetano Martínez de Irujo, así como a Alfonso Díez. 



Tanto hablar y tanto criticarle, y ahora, cuando el hombre ha llorado y se ha mostrado destrozado, aseguramos que el pobre Alfonso sí quería a la duquesa de Alba. Es que ya nos vale.



Se echa de menos a los Reyes, aunque asistió la infanta Elena en su representación. Una duda: si las hermanas del Rey ya no forman parte de la Casa Real, ¿sí pueden representar a los Reyes? No sé; yo ni idea. 

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